sábado, 20 de septiembre de 2014

Un hospital es un mundo

Pues cuando volví de mi turismo portugués me encontré con la noticia de que iba a trabajar en el hospital el mes de agosto.


Pues allí me fui a ver que me tenían preparado. Después de tres años que no me llamaban para ninguna sustitución debido a la crisis éste año parece ser que ya se puede contratar gente. En un mes contrataron tantas personas como las que habían contratado en total el año pasado. ¿Querrá decir esto que ya salimos de la crisis? Vamos a pensar que si.

Pues recorrí varios puestos a cada cual con mayores cosas que aprender. 

Las urgencias como siempre es de lo más duro a nivel personal. Ser el primero en ver a una persona con problemas, ver colas y colas de personas, pruebas de todo tipo, algún cero y visita a cámaras. Me tocó una noche en urgencias y claro como todos hemos pasado por allí alguna vez no hace falta que os cuente mucho pero claro desde dentro es otra historia.

Cuando llegué había tres colas en Triage, o sea, tres colas de personas para que se les derive a la consulta correspondiente: trauma, box o consulta según la patología. Imaginaos que noche, esperas de hasta 10 horas en algunos casos. También tengo que decir en defensa del hospital que la mayoría de las consultas se podrían solucionar en consultorio médico. Tenemos que ser conscientes cuando nos ocurra algo de la gravedad del caso. Si es algo sencillo lo mejor es ir al consultorio médico. Se les atenderá más rápido y si requieren algo más complicado les derivan al hospital. Mientras que, si por un consulta nos vamos al hospital, corremos el riesgo de estar allí horas porque habrá cosas más graves por delante y el resultado será el mismo que si hubieran ido al consultorio médico. 

Cuando la noche parecía que relajaba un poco se presenta un cero. Algunos preguntaréis que es un cero. Pues un cero es cuando llega una persona que viene en estado muy grave o complicado. Pues llegó una persona en esa situación y por si no lo sabéis inmediatamente suena un timbre y todo el personal médico se presenta en el box cero. En ese momento todas las urgencias se paran. Si escucháis ese timbre y estáis en urgencias a esperar porque los médicos están allí todos. Normalmente es algo rápido porque así hay que actuar y en muy poco tiempo se pasa a quirófano, UCI, UVI, coronarias, o en los peores casos (como fue éste) a cámaras.



Otra semana la pasé en RX y fue de lo más entretenida dentro de lo que es. Es un sitio donde aprendes mucho de fracturas y las ves en vivo y en directo pero lo que más me llamó la atención fueron unos niños pequeños de unos 6 años con la misma fractura. Digamos que los niños nos muestran como seremos de mayores. A ver que es algo doloroso no hace falta que lo diga, pero lo que demostraron los niños es como somos y como podemos enfrentarnos ante la misma lesión. Uno de ellos llegaba llorando a mares (normal), no podíamos ni tocarle (normal), y los gritos se oían por todos lados. El otro venía agarrándose el brazo el sólo, sin una lágrima. Entró a RX y súper tranquilo. Hacía todo lo que le decíamos y no decía nada. Después de la placa dice "no he llorado nada". Y se fue. Cuando volvió después de colocárselo a revisar venía todo ancho diciendo "no he llorado nada, ni cuando el médico me lo colocó. Impresionante el niño. Se fue con su escayola y diciendo a todo el mundo que no lloró nada, que ser portó como un mayor. 
Claro una pregunta: ¿qué es lo normal, el primer niño o el segundo? Yo creo que de nosotros depende como nos enfrentemos a las situaciones



Y para abreviar (que me estoy pasando) otra semana la pasé en quirófanos. ¿Qué puedo decir de quirófanos? Es un sitio muy duro  y a la vez muy gratificante. Vas a recoger a personas que van a ser operadas, que en el camino te cuentan lo que les van a hacer, o te preguntan que les van a hacer. Intentas calmarles, animarles. Ves tantas reacciones que alucinas de como somos las personas. Unas que van tranquilas ante algo duro, otras que van nerviosas por algo sencillo, operaciones largas, duras, complicadas. Ves gente conocida del barrio, ves casos que te impactan (yo viví uno de lo más duro para mi), ves al ser humano con todo su miedo ante otros seres humanos. Es una experiencia que nunca olvidaré. Eso si, si coincide que eres tú la misma que les bajó la que les vuelve a subir no veas como les cambia la cara. Te cuentan lo bien que están, si les duele, pero lo mejor es la cantidad de veces que te agradecen el trato que les has dado en el transcurso. Gracias a todas las personas que pasaron por mis manos de camino al quirófano y tantas sonrisas que me regalaron.




Guardaré mucho recuerdos buenos, la mayoría, de la gente con la que trabajé: Begoña, Leonides, Mariano, Dorina, Lourdes, Isabel, Benito, Amelia, Marian y muchos más. Gracias a los veteranos de transfer, rx, urgencias.... Ha sido una de las suplencias más gratificantes y buenas que he tenido.



sábado, 6 de septiembre de 2014

Vacaciones Portuguesas

Hola chic@s os tenía un poco abandonados. He tenido un verano la verdad que super atareado y super gratificante de modo personal.

En julio y después de mucho echarme para atrás decidí irme a Portugal para conocer a una persona con la que llevaba tiempo hablando y a la cual necesitaba conocer porque "lo cortes no quita lo valiente". Ella me entenderá.

Emprendí camino a tierras portuguesas y ya el viaje mereció la pena. Por Dios que vistas, que paisajes, que todo. Y la llegada a un lugar desconocido donde no conoces a nadie ni te cuento. Pero mereció 100000000 de veces la pena. Alijó me recibió con los brazos abiertos y la familia ni quiero contaros.

Así a groso modo decir que los paisajes son indescriptibles, las personas maravillosas, el trato de 5 estrellas y mil calificativos más. También decir que me pasé un mes "comiendo y bebiendo y sin parar de reír".


Un maravilloso día en un crucero por el Duero que por cierto es enorme, gigante, silencioso, precioso, maravilloso, relajante, estimulante.... Igualito que el Bernesga jajajaja. La verdad que lo que el Duero me transmitió tanto que no puedo describirlo con palabras. Algunos dirán que me entretengo con poco, pues si, pero porque se sacar de lo poco todo lo grande que tiene. 
Y bueno no voy a decir nada de sus comidas: el bacalao as natas, la aletría, la francesiña (bueno todo escrito a mi modo aunque no es lo correcto). Impresionante. Y de las bebidas ni hablemos y eso que no bebo. Claro visitando Mateus no podía pasar sin probar los vinos, los moscateles, los cócteles..... Vamos que quien no me conozca dudará de mi palabra dicha durante años jajajjajaja.



Solamente puedo decir GRACIAS. Gracias a Portugal por recibirme y mostrarme todos esos lugares paradisíacos, a sus gentes por hacerme sentir mejor que en casa, a la familia de Noemia por darme más amor y respeto del que nunca he visto en una familia, a Mateus por dejarme entrar en sus entrañas, a Vila Real por dejarme pasear por sus calles, a el río Duero por dejarme respirar su aroma, a todas las quintas que visité y todos sus caldos que probé, a Brangaza por dejarme cruzar, a Favallos por su cabezón caldo......


En definitiva GRACIAS a todas las personas y lugares que he recorrido y a los que espero volver en breve. Gracias por cruzaros en mi camino y por hacerme recargar mis pilas para mucho tiempo, aunque eso si, VOLVEREEEEEEEEEEEEEEEEEE.........